Seguir estos pasos te ayudará a preparar un chuletón espectacular y sabroso, al estilo profesional en tu cocina:
1. Selección y preparación previa
- Elige un chuletón de Vaca Rubia Gallega con buena maduración (de 30 a 60 días dry aged), reconocido por su sabor intenso y textura jugosa.
- Saca la pieza del refrigerador entre 1 y 2 horas antes de cocinar para que alcance temperatura ambiente. Así se cocina de forma más uniforme.
- Sécalo con papel de cocina. No lo salpimentes demasiado pronto para evitar que pierda jugos; espolvorea buena sal justo antes de cocinar.
2. Técnica de cocción: plancha o parrilla
- Calienta bien la superficie: ya sea parrilla, sartén de hierro o plancha, debe estar muy caliente.
- Añádelo sin aceite (la grasa del propio chuletón es suficiente).
- Cocina 4–6 minutos por lado, según el grosor y tu punto de cocción preferido:
- Aproximadamente 5 minutos por lado para término medio (unos 3 cm de grosor).
- Ajusta el tiempo si lo prefieres más hecho o más jugoso.
- No muevas la pieza durante la cocción para lograr una costra dorada adecuada.
3. Sellado y dorado ideal
- Durante el dorado, puedes añadir un poco de mantequilla, ajo y tomillo sobre la carne.
- Inclina ligeramente la carne para que suelte su grasa y báñala con esa misma grasa mientras se cocina.
4. Reposo crucial
- Retira el chuletón del fuego y déjalo reposar entre 5 y 10 minutos, cubierto ligeramente con papel de aluminio.
- Esto permite que los jugos internos se redistribuyan, manteniendo la carne jugosa y tierna.
5. Temperatura interna recomendada
- Para una cocción poco hecha: entre 50 y 55 °C.
- Para una cocción al punto: entre 60 y 65 °C.
- Usa un termómetro de carne para mayor precisión y seguridad.
6. Cortar y servir
- Corta en rebanadas gruesas, siguiendo la dirección de las fibras para facilitar el corte.
- Sirve directamente en una tabla de madera o fuente, dejando que cada comensal elija su porción.
🧠 Consejos adicionales
- No sobrecocines: un chuletón muy hecho pierde jugosidad y sabor.
- Utiliza una sartén de hierro fundido o una buena parrilla para lograr una costra crujiente y atractiva.
- Si tiene hueso, retendrá más calor y sabor, actuando como aislante natural.
- Acompaña con guarniciones sencillas: patatas asadas, pimientos del padrón, setas o una ensalada fresca.
- Un vino tinto estructurado (como un Ribera del Duero o un Priorat) realza los matices grasos y sabrosos de la carne.
Preparar un chuletón en casa requiere una carne de excelente calidad, control del calor y dominar la técnica de sellado y reposo. Con estos pasos conseguirás una carne jugosa, tierna y llena de carácter. ¡Buen provecho!